Había ganas de ver en directo la nueva aventura de Alberto Rionda con su nueva banda Alquimia y ayer por fin llegó el día tan esperado para los fans de la banda y me imagino que la mayoría fans de Avalanch también. Sabéis que me gusta empezar por las cosas negativas de todo, así que no será en esta entrada que cambie ese estilo. Alquimia en directo NECESITA una segunda guitarra, para mi esto es impepinable, no hay discusión posible, y espero que para próximas giras Alberto se decida, porque el hecho de no tener esa segunda guitarra resta mucha potencia a un estilo como el que ellos practican. Aparte de eso podríamos decir que el resto de la actuación fue prácticamente excelente, rozando un gran nivel todos los integrantes, y sobretodo por el liderazgo que Israel Ramos (voz) otorga al conjunto. Es muy difícil comparar situaciones, conjuntos y épocas, pero tengo claro que lo visto ayer no llega al nivel mostrado (en directo) por los últimos Avalanch, aquella gira presentando su último disco fue quizás la mejor gira que consiguieron, pero como digo una cosa digo otra, y es que tengo claro que Alquimia no lo tiene difícil para superar aquellos Avalanch. Fin de las comparaciones.
Alquimia ayer tocó íntegro su disco debut, siendo temas como Sacrifico, El Lobo y el Arca o Divina Providencia los que más aplausos se llevaron. Alternaron clásicos de los tres primeros discos de Avalanch como El Ángel Caído, Xana, La Llama Eterna, Pelayo, Antojo de un Dios y Torquemada que sonaron como hacía años no sonaban en directo, todo un regalazo para los fans de siempre. Sin duda la elección de Israel ha sido una de las mejores decisiones que Rionda ha tomado jamás, este chaval en directo es muy muy completo, tanto técnicamente como en actitud, no para de animar, de repartir simpatía, sonrisas y un buen rollo que hace que el show tenga un plus. Destacar las 2h 20min de actuación, se agradece encontrar bandas que les guste estar encima de un escenario, se pasaron volando. Muy muy bien.
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