Menudo giro a su sonido han dado esta gente, es una pena que los prejuicios no valoren objetivamente su propuesta musical y las ganas que tienen como músicos de aportar aire fresco a la actual parrilla mainstream, pero tienen un problema: su primer disco. Pesan demasiado las millones y millones de copias que vendieron (y siguen vendiendo) de Hybryd Theory, un verdadero hito que en su día marcó a muchos chavales y generaciones jóvenes de músicos. Con su segundo LP, Meteora, apostaron por asegurar sus rentas y parieron una segunda parte digna y a la altura de lo esperado. Fue con Minutes to Midnight cuando decidieron enfocar su talento por otros derroteros, y lo consiguieron a medias, no llegó a cuajar como se esperaba.
Sinceramente, con A Thousand Suns en mis manos, y con las escuchas pertinentes, ahora si parece que nos ofrecen lo que antes aparentaba estar desenfocado. Un obra conectada y dividida en 15 pistas con una virtud principal que es la atmósfera que cubre todos los temas, canciones extrañas, aparentemente inacabadas, con estructuras ilógicas, manteniendo eso si el sello de identidad del grupo, con una presencia de guitarras inexistente, donde las melodías ganan terreno y los sintetizadores hacen del álbum una dictadura. Comprendo las críticas que tuvieron por los fans más cerrados en su día(los mismos que hacen años lloraban por que el resto de la humanidad no fuese más abierta de mente), pero ahora, más de medio año después de la edición del disco no me creo que no haya calado en esos mismos chavales.
Linkin Park atesoran una gran dosis de talento, espero que me sigan dejando fuera de juego a cada nuevo disco.
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