Es la tercera vez que he podido ver a ANÍMIC, todas ellas desde que editaron uno de los mejores LP's del 2013, su último disco "Hannibal" y no puedo decir que haya sido su mejor actuación, las tres veces han estado igual de espléndidos. Logran una atmósfera encima del escenario tan siniestra a la par que misteriosa y reinvindicativa, pero ese paisaje se ve interrumpido por los contínuos parones entre tema y tema, y las contínuas impresiones compulsivas de su front woman. Habrá quien odie este hecho, habrá gente que le dé lo mismo, en mi opinión podrían mantener un buen equilibrio si se moderasen, aunque por otro lado también eso les da una personalidad única. Al final, si a ellos les parece bien es lo importante (el mismo caso se podría extrapolar a su guitarra, la cual toca casi de espaldas al público, habrá quien lo encuentre una falta de respeto...).
Musicalmente chapeau, elevan sus grandes canciones a una nueva dimensión en directo, que si tienes suerte y te toca un público que respete a los músicos enseguida te verás sumergido en el planeta de Anímic, y te aseguro que cuesta irse de él, esta gente engancha de mala manera, y uno ya cuentas los días para tener nuevo material.
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