Me sorprendió bastante que a medida que llegaba a la sala Razzmatazz de Barcelona más gente iba anunciando que buscaba entrada para ver a los americanos. La verdad es que sabía que iba a haber una buena entrada pero nunca creí que fueran a hacer Sold Out. Me alegro por ellos.
La verdad es que el concierto fue lo que esperaba, hace poco comenté que las críticas de sus directos no son muy agradecidas y realmente están fundamentadas todas esas notas que no llegan al notable. The Offspring no son malos en directo pero podrían ser muchísimo mejores, y no hablo tanto técninamente porque los temas son lo que son y no hay más, pero si me remito un poco a la actitud y saber estar encima de un escenario. Dexter parece que nunca haya estado de gira, verle es reconocer a un tío que lleva tres bolos con su banda, casi diría que no está a gusto teniendo que entretener a casi 1500 personas. En ese sentido mis pensamientos me recuerdan a Hansi Kürsh de Blind Guardian, y ahí tenéis millones de vídeos en la red para entender dicha comparación, aunque musicalmente no tengan nada que ver.
El último single Nothingtown sirvió de apertura de un concierto que sumó hora y cuarto de actuación, por cierto otro punto negativo que añadir a la lista, y ya que estamos comento el tercero: demasiados singles, demasiados temas comerciales cuando el punto fuerte de esta banda precisamente son los temas menos conocidos. Se echaron de menos canciones como The Meaning of Life o The Noose por citar dos ejemplos.
No obstante el despropósito máximo llegó con la absurda interpretación de Gone Away por parte de Dexter intentando imitar a Axl Rose, piano incluído. En serio, malísima adaptación de un tema con mucha más chicha para una versión acústica, Dexter no dejó respirar la melodía principal y buscaba enseguida el aplauso fácil. Fatal.
Pero no todo fue malo, como digo, a mi los discos de esta banda me encantan, me divierten y distraen cuando lo necesito y a pesar de no ser todo lo bueno que debiera el sonido, el resto de temas y gracias a un público entregadísimo, el concierto aprobó. Memorable el momento All I Want y Kids aren't Allright (himno).
La próxima vez que vengan me lo pensaré seriamente el ir a verlos, he tenido suficiente, prefiero seguir disfrutando de sus discos, no quiero que un concierto tan pasable fastidie mi relación con la banda.
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