No puedo decir que fuera un concierto malo el de ayer, porque no lo fue, pero ni mucho menos puedo afirmar que asistí a un gran show, podríamos dejarlo en decepionante, que simplemente no cumplió las expectativas de lo que se espera de una banda como Aerosmith. Y tampoco podría dar motivos muy concretos, fue más una cuestión de feeling que otra cosa, no es que la banda esté pletórica sobre el escenario, tampoco se arrastra por el mismo, sencillamente da la sensación de que aun queriendo son incapaces de llegar donde otros grupos van sobrados. Podemos empezar por el hecho de que tanto Tyler como Perry se llevan demasiado protagonismo y ojo, que sé quienes son, pero una cosa es eso y otra que también en directo dejes tan a la sombra al resto de miembros, ni en el solo de batería Tyler se pudo estar quieto.
Después el setlist teniendo los discos que tienen me pareció un tanto mal montado, demasiado Rock para todos, en eso deberían aprender de Metallica, y cuidado, que no tocaron Crazy, algo que agradezco, no porque no me guste el tema, pero, volviendo a la comparación con los de San Francisco, es un poco como el Enter Sandman, que uno está hasta los huevos del temita de marras. Un tanto forzado Tyler en Dream On, pero se le perdona, obviamente ya no tiene 20 años (ni de lejos vaya), y fantástico, eso si, el Back in the Saddle de su enorme Rocks y el tremendísimo como siempre Mama Kin.
En fin, que ni me quedé con ganas de más después de casi dos horas ni volvería a verles en los próximos 2-3 años viendo lo visto, a no ser que celebrasen una gira especial con material de sus primeros discos... bueno, todo llegará.
2 comentarios:
No estuve ayer. Lástima de lo que dices, aunque el carisma de Hamilton & co. me ha parecido siempre tan escaso que ya va bien que Tyler y Perry acaparen el show.
¡Saludos!
Yo fui predispuesto a pasarlo bien y ya sabia que el show se basaria en su material más reciente, a mi los temas 70,s y 80,s me gustaron mucho, sali contento del show.
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